EL IMPERSONAL
Y LOS PUEBLOS DE LA NATURALEZA 7.-
Preguntas y Respuestas Parte 6
Julio 2016
Bendito sea lo Eterno y la eternidad de tu Presencia. Tú que me escuchas, tú que estás aquí y tú que estás allá, vengo de nuevo a bendecirte y a revelarte a ti-mismo, si lo aceptas.
Entonces te dejo expresar, hablar e interrogar, a fin de alumbrarte de tu propio interior y de tu propia verdad. Permíteme bendecir tu Presencia, permíteme amarte más allá de tu nombre, y más allá de tu forma, en tu templo de Eternidad, en tu emanación de Amor, en tu paz y en tu felicidad. Recibe, recibe y da en el mismo don y en el mismo intercambio la gracia de la vida en el Amor y en el Uno.
Juntos en comunión, juntos en Unidad, y juntos en Verdad.
Preguntemos
Pregunta: ¿por quién ha sido creado el mundo de los elfos y de los dragones? ¿Es por María?
De la misma manera que en el seno de esta tierra existieron y todavía existen, en ciertos lugares, pueblos intra-terrestres que no son humanoides, María, creadora de mundos, sembró este mundo pero éste ya estaba ocupado, bien antes de su siembra, por formas no humanas y libres. El pueblo de los elfos, el pueblo de los dragones y los pueblos elementales de manera general, evolucionan libremente entre lo Absoluto y su forma de 5D. No necesitan ser creados porque fueron creados de toda eternidad desde la Fuente como Espíritus. La creación que os ha sido notificada respecto a esta tierra, corresponde más a la mezcla de ADN presente en esta dimensión carbonada que a toda otra forma de creación que evolucionan espontáneamente, creándose, de-creándose y recreándose en función a los influjos cósmicos, en función a las necesidades dimensionales en este mundo.
Estos pueblos no han sido creados en el sentido en el que María os creó, depositando en vosotros ni vuestra alma ni vuestros Espíritu, sino la forma necesaria a su manifestación en estos mundos dimensionales densos y pesados. No hay pues otra cosa que lo Increado y la Fuente primera al origen de los pueblos elementales, conciencias exteriorizadas y libres que se manifiestan según las dimensiones recorridas y vividas y esto, en toda libertad. No existe pues elemento inicial, como una mezcla de ADN, como es el caso en el seno de los mundos carbonados. Os recuerdo que los pueblos elementales no están en vuestra dimensión, y no son unos pueblos de carne, sino unos pueblos sutiles, no teniendo nada que ver con el encerramiento ni con la forma humana. Sin embargo sois y somos, por todas partes, hermanos y hermanas de la misma Fuente, hermanos y hermanas del mismo impulso de vida en el Amor y en la Libertad. Solo las formas dichas carbonadas, libres, necesitan de genetistas, de creadores, porque propiamente hablando, la creación de las dimensiones y la creación de los mundos, como de la conciencia, resultan, en definitiva, sólo de la interacción de los elementos en su respectiva proporción, conjugándose en el Éter para recrear una forma dada, en un espacio dado y en un tiempo dado.
No hay pues posibilidad de superposición entre la forma humana y las formas de la naturaleza. Hay por supuesto la misma filiación, pero esta filiación no es una filiación de carne, sino una filiación de Espíritu y de Libertad.
Los pueblos de la naturaleza no necesitan de alma, no necesitan de polaridad. Son Espíritus puros alojados en una forma libre, cuyas funciones son simplemente experimentar los planos dimensionales, salvo por supuesto en este mundo donde su papel, como lo especifiqué y lo especificaron ellos mismos, estos elementales intervienen en los procesos que permiten acabar el ciclo del encerramiento actual que vivís.
Más allá de los mundos carbonados, no hay necesidad de materia en el sentido en el que lo entienden, no necesitan de ADN tal como lo entienden, solo hay necesidad simplemente de la información-Luz que codifican y generan la forma en cualquier dimensión que sea. No hay predación, no hay necesidad de alimentarse de otra cosa, para estos elementales, que de Luz y de la energía distribuida por los vegetales, por los lugares, por los vórtices y por lo que está presente naturalmente en vuestro entorno carbonado de la Tierra.
No hay pues maestro de obra, hay solo conformación particular de una conciencia ilimitada en una forma pseudo limitada, que depende únicamente de una función o de un placer de experimentar la Vida, sin límites y sin condiciones.
He aquí la respuesta del silencio.
… Silencio …Preguntemos
Pregunta: en 1984, en una práctica chamánica, un sonido muy agudo viniendo de la izquierda atravesó el espacio hasta mi oído. Una vibración a nivel del primer chacra empezó entonces, provocando un estado de gozo extremo que se propagó por todo el cuerpo. La percepción del cuerpo había desaparecido, yo era el Universo, fundido en él, en éxtasis. Era apenas soportable, era poderoso. Sentí que continuar me haría morir, guardo una sensación indeleble. ¿Tiene alguna relación con el proceso en curso?
Bien amado, describes a la perfección lo que te ocurrió y que corresponde exactamente a lo que se celebra en vosotros desde hace muchos años, e incluso diría desde numerosas decenas de años para otros de entre vosotros. No obstante, y así como lo dices, hubo un miedo de morir. Esto basta en general para poner fin a la experiencia y no confiere un estado permanente y definitivo de lo que ha sido vivido en el momento de esta experiencia. Percibiste la bajada del Espíritu, descendiendo directamente en tu alma y hasta tu cuerpo físico, pero el miedo a la muerte o el miedo de morir basta para hacer detener la experiencia. No hubo pues, si no es el recuerdo y la reminiscencia, y la marca dejada en el seno de tus estructuras efímeras, de desaparición propiamente hablando o de revelación, si prefieres, del Absoluto, pero tocaste en esta ocasión la Última Presencia y la Morada de Paz Suprema, que es el último estrato de la conciencia antes de su aniquilamiento.
El miedo de morir, el miedo de perder tu cuerpo, basta, en esta clase de experiencia, para devolverte en el seno de los mundos densos, y te impiden reencontrar lo que ha sido vivido en ese momento. El peligro de trabajar en esta memoria indeleble, y de intentar revivirlo hoy lo que, como lo comprobaste, no puede reproducirse a la identidad exacta de lo que ha sido vivido hace tiempo. El peligro de toda experiencia es mantener la experiencia, que se vuelve pasado y que no concierne más a vuestro presente. La marca indeleble se vuelve la certeza de lo que eres en conciencia y más allá de la conciencia, pero hoy no obstante no basta con ser liberado, si no es en el momento colectivo de la humanidad.
No hubo pues, ni en este momento, ni abandono total a la Luz ni sacrificio de la persona. No obstante, y lo repito, esto basta para asegurar tu Liberación, así como tu Ascensión.
Debéis diferenciar cada vez más claramente en vosotros la diferencia entre la experiencia, ciertamente útil, y el estado permanente de la conciencia que no tiene nada que ver más con una experiencia, fuese ella la más intensa, la más extraordinaria y magnífica. Hay que llevar esto en la conciencia ordinaria, no como recuerdo ni incluso como reproducción de la experiencia, sino más bien por el sacrificio de la persona, poniendo fin a todo sentido de ser una identidad, reemplazándolo por el Amor, la Paz y la Libertad.
He aquí la respuesta del silencio.
… Silencio …
Preguntemos
Pregunta: desde hace varios meses, tengo mucosidad resistente a todo protocolo de cristales y tratamiento homeopático, que se transforma en saliva muy espesa. Ella se deposita en el paladar y la lengua y me despierta por la noche con la sensación de sofoco porque no logro deglutir. ¿Qué es?
Querida, a través de lo que expresas, tú mismo tienes la aclaración. Esto quiere decir simplemente que no hay que buscar una explicación, sino aceptar que tu cuerpo no puede integrar más las informaciones ligadas a los remedios homeopáticos, o también a los cristales. Tu cuerpo te invita por allí-mismo a cambiar de postura, a abandonar herramientas y muletas, e instrumentos de vibraciones, a fin de identificarte a ti mismo en lo que eres en tu Eternidad en el que, te lo recuerdo, todas las vibraciones de los Universos y Multiversos están ya presentes en ti.
Las manifestaciones de tu cuerpo te invitan pues a volcarte hacia ti-mismo, y exclusivamente hacia ti-mismo, con el fin de no depender más de cualquier remedio, cualquier vibración exterior a ti-mismo. Esto es la petición de la Inteligencia de la Luz a través de tu cuerpo. No hay otra explicación que ésta. Incluso si en el seno de la persona siempre puedes encontrar una causa, esto no es importante. Lo importante es de volcarte en ti-mismo, hacia ti-mismo, con el fin de dejar obrar la Inteligencia pura de la Luz y no una codificación vibratoria, fuese la más luminosa, pero aportada desde el exterior.
Así que la Inteligencia de la Luz y la inteligencia de tu cuerpo te piden así volcarte hacia tu centro y no depender más de ninguna ayuda exterior. No se trata ni de un bloqueo ni de una anomalía, sino de una llamada de tu cuerpo, de tu alma y del Espíritu, permitiéndote situarte de otro modo, y sobre todo de encontrar la Autonomía y la Libertad. Algunos de vosotros en este momento necesitan, todavía, de vibraciones exteriores, de conciencias exteriores, de una historia cualquiera que sea, y otros de entre vosotros, incluso sin saberlo, deben encontrar en ellos la desnudez de su propia conciencia, la verdad de su ser profundo así que el Espíritu, con el fin de no depender más de algo exterior a sí, o en todo caso concebido como exterior a sí.
He aquí la respuesta de la Luz.
… Silencio … Preguntemos
Pregunta: desde algún tiempo, una detonante se produjo en mí, con la Alegría que me lleva a actuar sin apuesta ni proyección, en el instante presente. ¿Puede invitarnos a quedarnos inmóviles? ¿Son estas posturas opuestas o complementarias para acoger el Absoluto?
No estoy seguro de haber entendido, habiendo escuchado perfectamente lo que dijiste. Entonces repite la pregunta.
Pregunta: desde un tiempo, una detonante se produjo en mí, con la Alegría que me lleva a actuar sin objetivo ni proyección, en el instante presente. Puede invitarnos a quedarnos inmóviles …
No sé lo que quiere decir de «poder invitarnos a quedarnos inmóviles». ¿Qué significa esto en el marco de una pregunta?
Pregunta: la persona que hizo la pregunta no está aquí. ¿Ella pregunta luego si el hecho de actuar, de tener la alegría permanentemente, es contrario o complementario a la acogida del Absoluto?
La Alegría y la Paz, el juego sin objetivo es vinculado directamente a la Infinita Presencia, al Sí, pero en ningún caso al Absoluto. El Absoluto no tiene que ser acogido, tiene que ser revelado en sí. El Absoluto es la extinción de la conciencia, donde no hay ni juego, ni proyección, ni espontaneidad, donde hay simplemente evidencia de vivir lo que somos. Por supuesto, la traducción y la manifestación en el seno de vuestra dimensión puede ser proteiforme. Cada uno, según la historia de la persona, traducirá esto en palabras, en actitudes, vinculadas no a sus creencias sino simplemente a sus costumbres y diría, a la conformación de su cerebro como de sus cuerpos sutiles.
La espontaneidad, el hecho de vivir lo que es descrito en esta pregunta, no es un testigo del Absoluto, sino un testimonio hecho al Sí y a la Infinita Presencia, lo que, os recuerdo, es ya ampliamente suficiente para vivir la Libertad en el momento llegado.
El Absoluto no puede ser acogido al igual que la Luz. Incluso diría que es exactamente lo contrario: se trata de una restitución de la Luz, ya que el Absoluto es anterior a la Luz. No hay pues necesidad allí, en el Liberado Viviente, hasta si estas manifestaciones están presentes, ni de Luz, ni de sombra, ni de bien, ni de mal, ni de proyección en cualquier juego que sea o en cualquier dimensión que sea.
Hay pues que diferenciar lo que es del orden de la conciencia en manifestación, liberada, de lo que es la a‑consciencia. El Liberado Viviente es espontáneo, él también puede actuar el juego de la manifestación pero no se hace la pregunta de lo que es, porque está más allá de todo juego, más allá de toda danza como de toda manifestación. Él se queda lo más a menudo, cualquiera que sea su actividad y su proyección exterior, al límite, si puedo expresarme así, entre el Corazón del Corazón o la Infinita Presencia, o la Última Presencia, la Morada de Paz Suprema y su propia desaparición.
Así que en ningún caso él Sí, hasta estabilizado, en ningún caso la espontaneidad y la alegría sin objeto, no puede ser otra cosa que lo que él es, es decir una manifestación de la conciencia que no está más encerrada, pero hay aun un consciente ya que hay manifestación. El Liberado puede vivir exactamente la misma cosa ya que sigue la Inteligencia de la Luz, las líneas de menor resistencias, que acoge la Vida, ya que él es la Vida misma. Él no se hace la pregunta de saber si es Absoluto, juega todos los juegos que la Vida le presenta, en esta forma como en toda forma.
He aquí la respuesta del silencio.
… Silencio …Preguntemos
Pregunta: tuve este sueño: estoy en un cuarto donde un ser de polaridad masculina acompaña a una mujer a cantar con su corazón. Él le propone ejercitarse, así como a mi madre que está presente, que se niega y se aleja. Tengo ganas de vivir esta experiencia y lo solicito a este ser. Él me dice de escuchar mi Corazón y de hablar con mi Corazón. Lo consigo y no me veo vivir la etapa del despertar, pues ya estoy despierta. ¿Puede aclararme?
Bien amado, te invito primero a revisar tu vocabulario. ¿Por qué quieres que esto sea un sueño? No olvides las capacidades de des-localización y de multi-localización de la conciencia en el seno de los Mundos Libres. Esto es posible hoy por la superposición de vuestro cuerpo efímero y del cuerpo de Eternidad. Tuviste pues, en lo que no es un sueño sino más bien un transporte de tu conciencia en el seno de otra realidad, también real e irreal como tu propia persona y que este mundo en el que estas.
Existen unos mecanismos de la conciencia, y pues de la proyección de la conciencia en este mundo como en todo mundo, que se abren a vosotros. Bien evidentemente no se trata de sueños, incluso si esto pueda tener el aspecto ya que sobreviniendo en el momento en el que duermen o cuando estáis en todo caso descansado, lo más a menudo acostados.
Este género de manifestación, como otras manifestaciones, donde ocurre lo que llamas el sueño al despertar, significa justamente que esto no está ligado a tu despertar, como por la mañana, y pues no es un sueño sino uno de los aspectos de la conciencia multifocal y multifunción manifestándose, desde ahora, libremente para ti como para muchos hermanos y hermanas humanos encarnados en el seno de su propia multi-dimensionalidad. Esto es, si prefieres, bucles temporales o de ultra-temporalidad que te conducen a experimentar diferentes conciencias, que sólo son nada más que la tuya, a lo largo de, yo diría, de líneas de tiempo paralelas que existen de modo sincrónico a la realidad que calificaría de habituales, encarnada en este mundo.
No veáis, a través de estas des-localizaciones de conciencia o viajes en ultra-temporalidad, cosas a explicar o que haya que comprender, sino simplemente unas experiencias de la conciencia que hay que vivir y dejar fluir libremente. Incluso a esto no podéis agarraros, hasta esto no podeis ser propietarios de estas experiencias de la conciencia multifocal o multifunción. Ellas también, estas experiencias, sólo pasan y concluirán del mismo modo en el momento colectivo. No hay nada donde atarse, no hay nada donde ponerse, hay solo a atravesar lo que la Inteligencia de la Vida y de tu propia conciencia te hace vivir en esos momentos.
La repetición de estas experiencias, en sus diferentes formas, es para cada uno la ocasión de ver lo que apreciáis, y a lo que aceptáis: el sacrificio y el don. El conjunto de las experiencias, e incluso los encuentros con los pueblos elementales, no están allí a título de curiosidad, ni para daros elementos de vida de estos pueblos, sino más para permitiros atravesar esto y llegar finalmente a la vivencia de que todo esto se celebra en vosotros, en vuestra Eternidad, pero no depende de vosotros en este mundo. Así es como se produce la más exacta de las superposiciones entre lo efímero y el Eterno. Cualquiera que sea la forma que tome la experiencia, que esto sea en sueño, que esto sea en conciencia des-localizada o multi-localizada, no tardéis, ni os retraséis más, contentaos simplemente de atravesar esto con gracia, con elegancia, con ligereza y en paz, sin buscar apropiaros de cualquiera de estas experiencias, porque no está allí para aportaros algo, sino simplemente para devolveros a vosotros-mismos
Entonces atravesad esto de la misma manera que atravesáis vuestras
ocupaciones diarias, dejando libremente la Inteligencia de la Vida y de la Luz,
permitir establecer en vosotros la permanencia del estado de Gracia. Toda
búsqueda al sobrevenir en estos momentos o posteriormente, toda búsqueda de
sentido, de explicación, de identificación, os aleja desde ahora en adelante de
lo que Sois. Hace falta, cualesquiera que sean las circunstancias – tanto de la
conciencia ordinaria que de la supra-consciencia manifestable en vosotros en
ese momento –, sobrepasad todo esto, trascendedlo. Sólo ved la Paz y la Alegría
que derivan de estas experiencias cuando aceptáis soltarlas sin interesaros por
ello, porque ya ha pasado en el momento en el que os salís de eso.
Todo lo que es pasado, incluso lo más transcendental, está hoy, y se hará cada día un poco más, de vuestro tiempo que fluye, un obstáculo cada vez más poderoso a vuestra libertad, por lo menos hasta el momento colectivo. El conjunto de estas experiencias traducen simplemente la puesta en adecuación del Eterno y de lo efímero, a través de diferentes formas, de diferentes experiencias, de diferentes niveles dimensionales o vibratorios, pero no sois nada de todo esto.
Allí está el aprendizaje, allí está la verdadera comprensión de lo que ocurre. No hay historia que buscar, no hay causalidad que haya que buscar, no hay explicaciones que mantienen el camino en relación a lo que Sois: sin forma, sin historia, sin memoria, sin pasado y sin futuro.
En este momento impulsareis naturalmente, si esto es necesario para vosotros, el proceso de disolución del alma, dejando establecerse la vacuidad donde ninguna forma, ninguna historia, ningún escenario, incluso el más extraordinario, es necesario. El tiempo de las historias está ahora acabado y cumplido, el tiempo de las experiencias también. Ya es hora de vivir el encuentro – con vosotros mismos –, hasta si esto pasa aún por estas historias multifocales o multimodales, hasta si esto todavía pasa por el encuentro con los pueblos de la naturaleza, o con uno de los Ancianos, una de las Estrellas o cualquiera que sea el miembro de la Confederación Intergaláctica de los Mundos Libres. Todo esto sólo representa pretextos para giraros hacia vosotros mismos y estableceros sin esfuerzo en la vacuidad de la Morada de Paz Suprema, en la Dicha sin objeto, en la Alegría sin soporte, y sobre todo en la Alegría sin historia y sin escenario. Entended esto y soltad todo, entonces seréis Libres instantáneamente.
Es a esto a lo que os invito y a lo que os invité, desde hace ya un mes.
Todo lo que es pasado, incluso lo más transcendental, está hoy, y se hará cada día un poco más, de vuestro tiempo que fluye, un obstáculo cada vez más poderoso a vuestra libertad, por lo menos hasta el momento colectivo. El conjunto de estas experiencias traducen simplemente la puesta en adecuación del Eterno y de lo efímero, a través de diferentes formas, de diferentes experiencias, de diferentes niveles dimensionales o vibratorios, pero no sois nada de todo esto.
Allí está el aprendizaje, allí está la verdadera comprensión de lo que ocurre. No hay historia que buscar, no hay causalidad que haya que buscar, no hay explicaciones que mantienen el camino en relación a lo que Sois: sin forma, sin historia, sin memoria, sin pasado y sin futuro.
En este momento impulsareis naturalmente, si esto es necesario para vosotros, el proceso de disolución del alma, dejando establecerse la vacuidad donde ninguna forma, ninguna historia, ningún escenario, incluso el más extraordinario, es necesario. El tiempo de las historias está ahora acabado y cumplido, el tiempo de las experiencias también. Ya es hora de vivir el encuentro – con vosotros mismos –, hasta si esto pasa aún por estas historias multifocales o multimodales, hasta si esto todavía pasa por el encuentro con los pueblos de la naturaleza, o con uno de los Ancianos, una de las Estrellas o cualquiera que sea el miembro de la Confederación Intergaláctica de los Mundos Libres. Todo esto sólo representa pretextos para giraros hacia vosotros mismos y estableceros sin esfuerzo en la vacuidad de la Morada de Paz Suprema, en la Dicha sin objeto, en la Alegría sin soporte, y sobre todo en la Alegría sin historia y sin escenario. Entended esto y soltad todo, entonces seréis Libres instantáneamente.
Es a esto a lo que os invito y a lo que os invité, desde hace ya un mes.
He aquí la respuesta del silencio.
… Silencio …
Preguntemos
Pregunta: en estos tiempos reducidos, los cristales como el fluorita romboidal o la tanzanita se revelan para ayudarnos a vivir nuestra eternidad. ¿La piedra del Absoluto va a revelarse pronto?
Bien amado, cada cristal, cualquiera que sea, el más vil a vuestros ojos como el más raro a vuestros ojos, es portador del Absoluto. Su geometría, su forma, su composición, su color, sólo son unas manifestaciones del Absoluto. No obstante existe un cristal cuya resonancia al Absoluto es ciertamente la más evidente y la más cercana, se trata del cristal azul de Sirio, aportado por los Élohim y escondido en cuevas en América Latina. Este cristal es una copia, si puedo decir conforme, al núcleo cristalino de la Tierra y de la vibración de Sirio.
Así que, un cierto número de cristales, lo más a menudo de color azul, pueden proporcionaros una ayuda hasta el umbral del Absoluto en vosotros. Esto es utilizado de diferentes modos, y por otra parte preconizado por el Arcángel Anaël o por algunos interventores en el momento de ciertos trabajos. La piedra más difundida es bien evidentemente el zafiro azul, piedra que da beneficio y remite al Espíritu, y entonces también al Absoluto.
La forma hexagonal, así como la forma llamada romboidal, son las formas arquetípicas que os permiten salir del tiempo de manera cada vez más fácil, es decir de reencontraros en el corazón del Sí, en el corazón de la Infinita Presencia, en el Corazón del Corazón. Para algunos de entre vosotros esto puede ser una ayuda, para otros no, os pertenece probar, y de intentar. El azul os remite no sólo al cristal azul de Sirio, sino también a lo que fue llamado, por el bien amado Juan, la Obra al Azul o la fusión de los Éteres.
Todos los cristales cuyo color es azul, todos los cristales en forma de dodecaedro, y cualquiera que sea este dodecaedro, os reenvían el Êtreté, a vuestro Corazón, por resonancia vibral y por posibilidad de acogida de esta vibración, de esta forma que se acerca más a la estructura de Eternidad, no de vuestro cuerpo de Êtreté, sino ante todo despliegue de toda forma que existe en el seno de lo que fue nombrado el tetraquiexaedro.
Os es pues posible o bien tener – y esto, la pregunta ha sido hecha – una forma de rechazo de los cristales, en este momento hay una invitación a cruzar el umbral, o al contrario de beneficiaros del influjo de estas codificaciones de Luz a través de diversos cristales, como en otros medios por otra parte pero en cuanto a los cristales, existe un cierto número de cristales a privilegiar. Éstos no tienen que estar necesariamente dispuestos según un protocolo preciso, sino simplemente a entrar en vuestro efímero, en algún punto de este cuerpo. Entre éstos, hay por supuesto un zafiro azul, el cuarzo Aqua-Aura, la tanzanita, la alejandrina, la celtista, el lapislázuli, y tantos otros que se acercan al morado, por ejemplo como la turmalina llamada indigolita.
Así como lo comprueban tal vez para algunos de entre vosotros que utilizan los cristales desde algún tiempo, la disposición de los cristales según un orden preciso sobre el cuerpo o alrededor vuestro se hace cada vez menos indispensable. La codificación vibratoria de un cristal en su esencia penetran directamente vuestra conciencia, sin necesariamente pasar ni por la energía ni por la vibración. Vuestra conciencia es pues a priori suficientemente expandida para reconocerse en la vibración que encontráis en un cristal dado, sobre todo, lo repito, para los cristales azules.
Existen por supuesto una infinidad de otros, a vosotros de descubrirlos. No puedo desgraciadamente nombrarlos todos, pero el zafiro azul es, diría, el dirigente, al igual que piedras más raras que contienen lo que es nombrado “tierras raras” o minerales metálicos, incluso si estos minerales están en cantidad relativamente poco abundante en el seno de un cristal dado. Un átomo de este mineral en la estructura de un cristal basta para ponerse en contacto con vuestra conciencia.
Por otro lado, os hablé también de los sistemas cristalinos hexagonales o romboidales que pueden tener también una utilidad para permitiros salir de toda historia, de todo escenario y también del tiempo, es decir de situaros en el Aquí y Ahora, Hic y Nunc, independientemente de vuestra persona.
He aquí la respuesta del silencio.
… Silencio … Preguntemos
Pregunta: durante su último encuentro y tentación de Māra, Siddhartha tocó el suelo diciendo: «La tierra es mi testigo». ¿Qué quiso decir con aquel gesto y aquellas palabras
En este mundo, si no hay testigo, en vuestra tierra – el suelo de esta tierra como vuestro cuerpo que es oriundo de la tierra, os lo recuerdo – digáis lo que digáis y penséis lo que penséis, fueren cuales fueren vuestros orígenes o linajes estelares, el cuerpo pertenece a la tierra y retornará a la tierra o al fuego, si preferís quemarlo. Eso quiere decir que todo lo que es Despertar, que todo lo que es Liberación o Realización, en una terminología diferente y en particular budista, quiere decir que lo que no se graba en la carne es ilusión total. Mientras no haya encarnación de la Luz en lo más profundo de vuestra carne, y no sólo de vuestra alma o de vuestro Espíritu, no puede haber estado de Buda.
La Budeidad consiste en transmutar el conjunto de vuestra materia y no sólo de vuestra conciencia. En eso consiste la enseñanza, en particular aquélla reproducida en lo que fue llamado «los Sutras de Diamante», mucho tiempo después de la venida del Buda.
Mientras el puro Espíritu no haya alcanzado, fecundado y transmutado vuestra materia y vuestra persona, quedáis sometidos a la dualidad, quedáis sometidos a la causalidad. El Espíritu tiene que fecundar la carne, fuese cual fuese el devenir de aquella carne, a fin de que la conciencia esté efectiva y concretamente liberada, tanto de dicha carne como del alma, a fin de ser Espíritu libre. Mientras no haya encarnación de la Luz y del Espíritu en cada una de las parcelas de este cuerpo de carne, no podéis ser testigos de la Verdad. Fue eso lo que quiso decir el Buda, del mismo modo como fue eso mismo lo que expresó el Cristo en la cruz.
Así responde el silencio.
… Silencio…
Otra pregunta.
Pregunta: no tenemos más preguntas, le damos las gracias.
Permanezcamos juntos en el silencio de la Gracia, en comunión y en desaparición.
Me entrego a cada uno de ti, como cada uno de ti se entrega a mí, en la misma Gracia, en la misma evidencia. En el mismo tiempo como en todo tiempo, aquí estoy, como estás aquí.
Olvídate de tu forma y olvídate de toda forma. Tú, el no nacido, aquél que nunca muere, óyete en lo más profundo de ti, en lo íntimo de tu Corazón, en lo íntimo de la Verdad, ahí donde no hay más palabras, ahí donde no hay más Presencia, ahí donde no hay más conciencia, ahí donde no queda nada a percibir, a sentir o a ser. Así, más allá de la noción de ser y de no ser, en la Libertad eres.
Sea cual sea tu forma, sea cual sea tu edad, sea cual sea tu estado, despierto o adormecido, liberado o prisionero de ti mismo o de las circunstancias, escucha. Escucha, y oye esta vacuidad.
Ahí está lo que eres, ahí está lo que cada uno de ti es, en mí como en él.
Reconócete más allá de todo conocimiento o de todo escenario.
Sé la Vida y no una vida en el seno de una forma.
Sé lo Verdadero y no una verdad fraccionaria.
Sin condiciones y sin restricciones así es. Recibe el don de la Gracia y despierta pues, en definitiva, jamás te dormiste.
Sé presente y sé ausente.
Olvídate de todo para comprender y experimentar que tú eres el Todo.
Olvídate de ti y olvídate de mí. Olvídate de cada uno, no para apartarte de él, sino para hacerlo tuyo, más allá de toda posesión y de toda restricción.
Escucha. Oye y ve. Afírmate conmigo.
Escucha...
… Silencio…
Permite que el Fuego del Amor transfigure lo que se opone.
… Silencio…
Colócate en tu Templo. Lleva tu conciencia ahí donde no puede estar, ahí donde desaparece, ahí donde el Amor no puede conocer su contrario, su opuesto o sus límites.
… Silencio…
Ahí, ahí estás, en las puertas de lo indecible. Nada temas. Ningún umbral ni ninguna puerta hay en realidad y en definitiva. Solamente hay eso y todo eso.
… Silencio…
Llegaste. No hay desplazamiento. No hay movimiento. Y sin embargo todo está aquí.
… Silencio…
Anterior a toda forma, te hablo. Sean cuales sean mis palabras, ellas te invitan a ir más allá, a traspasarlas y a depositarlas. Solo quédate con su esencia, que es tu esencia.
… Silencio…
De hecho, solamente hay una sola pregunta que ha de ser incesante, no para buscar la respuesta sino para que ésta llegue tras haber agotado todas las historias, todos los libretos y todas las suposiciones: ¿quién soy? ¿quién eres?
Entonces, de manera fulgurante o por etapas, desvela en ti lo superfluo de toda historia, de toda vida y de todo libreto, como de toda dimensión, no porque aquello no existe, sino porque eres mucho más que todas las dimensiones reunidas.
No eres una fracción de la Verdad, no eres una forma, no eres una historia, no eres un meta ni una búsqueda.
¿Quién eres?
Descúbrete.
… Silencio…
Nada nombres. Nada clasifiques. Nada juzgues. Ama, y sé libre.
Disfruta el néctar de tu Eternidad.
Transfigúrate a ti-mismo.
Despójate de los ropajes de la conciencia. Desnúdate. Nada ocultes. No rechaces ni aceptes nada.
… Silencio…
Ahí no queda ni tú ni yo. Ahí no hay nadie y al mismo tiempo toda vida y toda persona.
… Silencio…
Emerge de ti mismo, date a luz. En la ley del Uno que no conoce ley alguna que no sea la que es, y que es Amor.
… Silencio…
¿Me oyes? ¿Te oyes en el silencio?
… Silencio…
En el mismo tiempo del eterno presente, despliega y repliega lo que es, y lo que no es. Entre el ser y el no ser, no hay a elegir, no hay distancia ni separación. Todo es Uno.
Vívelo. No hay frenos. No hay obstáculos.
… Silencio…
Aquí y Ahora.
… Silencio…
Estás preparado. No hay mejor momento que aquí y ahora.
Ponte ahí donde el tiempo no decide nada, ahí donde el cuerpo no puede obstaculizarte o restringirte.
… Silencio…
En este silencio, tan lleno y tan vacío, no diferencias más entre lo lleno y lo vacío. ¿Dónde está lo lleno? ¿Dónde está lo vacío?
Descansa.
… Silencio…
Nada esperes ni nada proyectes, ni de ti ni de mí, quédate simplemente ahí, presente y ausente a la vez. Ahí está tu verdadero, ahí está lo Verdadero. Nútrete de esto, pues ahí está el festín del rey, que ha de saciarte para siempre de toda búsqueda.
… Silencio…
Ámame como yo te amo. Ama y quiere a cada cual como a ti mismo y como a la forma a la que más amas. No veas más diferencias y no hagas más diferencias pues en el Espíritu no las hay. Solamente la forma y tu persona perciben una diferencia. Cambia tu mirada.
Al mirar a cada uno te ves a ti mismo.
… Silencio…
En esta Paz estás convidado a la Eternidad, a la Infinitud.
No te dejo pero sí encuéntrame en ti, en la naturaleza, en todos los demás, aquí o en otras partes. No hay nada más que mirar pues cualquier otra mirada te aparta de esto.
… Silencio…
Me retiro en el silencio de tu Corazón, ahí donde nunca estoy ausente, ahí donde soy tú como tú eres yo.
… Silencio…
Permanece así, todo el tiempo necesario antes de salir del no tiempo.
… Silencio…
Bendigo nuevamente tu Presencia y tu Ausencia, pues el Amor es bendición, pues el Amor es Luz.
Vuelve en ti a medida que entro en ti por completo.
Ámate pues al amarte amarás a cada uno por igual y en totalidad, más allá de toda condición, de todo límite y, sobre todo, de toda forma y de toda historia.
Déjame sonreír en ti.
… Silencio…
Aquí estoy, en todas partes estoy, igual que tú.
Continúa en la Paz. Quedo en silencio ahora.
Tras escucharme, tras leerme, tómate un tiempo para permanecer en ti, en la naturaleza o en tu cama o con otro de ti, no importa.
Te amo, te amo, te amo...
Me callo y te digo hasta muy pronto con nuevas palabras, con una nueva ronda y con un nuevo silencio.
Te digo hasta siempre.
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